Como diga Jack El destripador, "vamos por partes"
Nahual con Machete escribió:Ahora, si bien podemos decir entonces (asegun entendi )que los movimientos con el sable tienden a ser mas abiertos por el preferente uso del tajo en su forma ¿esto lo pone en franca desventaja ante una arma de punta?
Los movimientos de tajo y revés son más amplios, pero no necesariamente más abiertos. En general, al tirar el corte, es la punta la que describe el círculo, pero la mano queda más o menos en la misma posición. Combinado con el desplazamiento correcto, se mantiene la cobertura al quedar el cuerpo siempre detrás del sable.
No se puede hablar de desventaja, sino de esgrimas sustancialmente distintas: la ropera tiene mayor alcance en la estocada, pero no puede resistir un batimiento del sable. Las distancias son distintas para cada arma, por lo que al tirador de ropera le interesará no entrar al alcance del sable, y al sablista esperar en una guardia adecuada y entrar al contraataque si el de la ropera se acerca demasiado.
Nahual con Machete escribió:, ¿el uso de esta en el sable es el eqivalente al uso de filo en la ropera (osea, solo un recurso extra, que no una fucion expresa del arma)?
La respuesta sencilla es que tácticamente su empleo se podría considerar similar: una acción útil en determinadas circunstancias, más para obligar al contrario a hacer frente a la amenaza que por las probabilidades de éxito de la misma.
La compleja, que depende del sable y de la ropera: en las roperas del XVI y principios del XVII, más cortas y pesadas, las acciones de corte son tan importantes como las de estocadas; los sables rectos, o de curvatura no muy pronunciada, dan a las acciones de punta mayor alcance.
Nahual con Machete escribió:Otra pregunta. Ciertamente el sable esta pensado para el tajo, y a caballo entendemos que haria heridas terribles ¿a pie su capacidad de corte sigue siendo tan temible?
Pues sí. Aún a pié, un tajo o revés bien formado (la punta ha descrito un círculo completo) es más que suficiente para quitarse de enmedio al contrario. Para que te hagas una idea: en el combate con backsword ( que en algunos aspectos es bastante asimilable al sable ), al tirar el corte se avanza (hacia el exterior si es un tajo, hacia el interior si es revés) y al alcanzar al contrario, se gira la muñeca y se retrocede: el giro de muñeca es para dar un corte adicional con el contrafilo, y el retroceso tiene dos funciones: una, hacer el corte con el contrafilo (en inglés se llama "drawing cut", creo) y la otra quitarse de la trayectoria de la espada contraria, porque aunque el contrario esté muerto o gravemente herido, si ha iniciado el ataque, la inercia del arma es tal que nos puede causar bastantes destrozos aun guiada por una mano muerta.
Evidentemente, los golpes siguen siendo más potentes desde un caballo, ya que el impacto se produce al final de la parte descendente de la trayectoria de la hoja, cuando a pié se produce más o menos a mitad de trayectoria, pero sigue siendo suficiente.
Nahual con Machete escribió:¿alguien ha hecho pruebas asi como con las katanas y las espadas medievales? ¿esta arma sera capaz de competir en eficazia y capacidad de corte con una espada japonesa?
La clave en este caso es la curvatura de la hoja. Más o menos creo que la cosa va así: en un corte, la hoja describe un movimiento circular. En el punto de impacto, en el caso de una hoja recta, son dos planos los que se encuentran en ángulo, por lo que el movimiento de la hoja se detiene, y parte de la energía que contenía se disipa en forma de deformación elástica de la hoja (y de calor, como siempre); pero en el caso de una hoja curva (sea de catana o de sable) en el punto de impacto se encuentran un plano y una curva y en la medida en que dicha curva coincida con la curva del movimiento, éste continúa, haciendo el corte más largo y profundo.
En capacidad de corte, por tanto, un catana gana de lejos a una hoja recta medieval (alguna prueba de corte, completamente acientífica, que conste, hemos hecho al respecto, con los resultados mencionados), pero está por ver una comparativa de corte entre un catana y un sable occidental, que me da en la nariz que la diferencia no va a ser sustancial.
Otra cosa es que el corte en sí no lo es todo: me gustaría hacer una prueba de corte contra un objetivo con carne y hueso: sabemos que el catana corta la carne como mantequilla, mientras que una mano y media se queda "atascada" en un corte menos profundo, pero querría ver los efectos en el hueso de los golpes descargados con una o con otra.
Un saludo.
P.D. Don Román, un día de estos tenemos que hablar usted y yo sobre el particular, con unas cerveciyas delante si es posible.