En mi visita creo recordar haber visto esas hojas que citas, de hecho, nos hizo una demostración de la calidad del metal con una ropera de lazo, clavando su punta en un taco de madera y doblando la hoja hasta casi formar una U.midelburgo escribió:Estos años me ha seguido sorprendiendo que la gente en vez de seguir este procedimiento aseptico (que supongo que es lo que hacen sus "retailers" en USA), intente convencerle de algo y repetidamente acaben discutiendo con el.
Por el contrario, las hojas medievales no ofrecían tantas garantías, por infinidad de detalles de construcción. Además de que en general eran tremendamente pesadas y desequilibradas. Por otro lado, mi asociación, Complutum, y sus diversas secciones, junto con otra de la que formaba parte y actuaba como representante, están centradas en la Antigüedad. Y ahí está el problema.
Si alguien quiere que Mariano Zamorano le haga un gladius, hay que tener en cuenta que esta persona está absolutamente convencida que esto lo son
http://www.marianozamorano.com/Esp_Romanas.htm
... por lo que esa estrategia de hacerse el sueco e ir al grano resulta muy poco efectiva.
El hecho es que para comprar a este señor algo que no sea una hoja de ropera lo primero de todo habría que convencerle de ciertas cosas. Y eso te aseguro que es una tarea imposible.
Efectivamente, a mí de un artesano sólo me interesa la calidad y el precio de sus productos, no busco ganar amigos ni el irme de copas con él. Tampoco me gusta discutir con la gente. De hecho, con él ni tan siquiera lo intenté y sencillamente lo que hice fue seguirle la corriente. Me contó su película, me dio su tarjeta, me dijo que le escribiera para solicitarle un presupuesto y no lo hice. Otros acompañantes, que iban a realizarle varios encargos, vieron el percal y ni tan siquiera le expusieron el tema.
De hecho, ese proceso aséptico que citas es el que me gusta. Cada vez que he comprado una espada, ya sea una de Paul Binns o Del Tin, no he intercambiado más de dos o tres correos breves. Y es que realmente me resulta cansino tener que “formar” a la persona que me va a hacer un producto... cuando él debiera saber cómo era una espada histórica mejor que yo.
Por otro lado, como ya se ha dicho, este señor no tiene en su taller ni tan siquiera las herramientas necesaria para hacer esos rebajes a las planchas de hierro. Tan sólo, creo recordar, algún útil de fundición y lo necesario para ensamblar o ajustar las distintas piezas. Es decir, que él mismo se trata de un “retailer” y en su momento consideré que además no tenía sentido recurrir a un intermediario, cuando podría ponerme en contacto con el auténtico fabricante... que a lo mejor resulta que es pakistaní o indú.