Antes de nada voy a reconocer que mi experiencia en el tema es baja: he hecho pruebas y he leido bastante, porque me interesaba para un proyecto que tengo en
standby desde hace mucho tiempo, pero no tengo una experiencia "de todos los días" que sería algo muy interesante de leer, así que con esta contestación mía no deis por zanjado el tema.
Respecto a los
valores que debe tener la corriente de la fuente se suele hablar de 12 voltios más que nada porque es algo bastante estandarizado y fácil de conseguir y porque algún valor concreto se debía dar a la hora de empezar a aplicar esta técnica en restauración de metales y los 12 voltios están dentro del rango en que el proceso electrolítico ocurre de una forma adecuada a lo que queremos conseguir.
Una fuente de
Ibertren permite regular los valores de salida de voltaje (o eso hacía la que yo tenía cuando era niño), y creo (ahora hablo de cabeza) que el valor máximo estaba por ahí, por los 12 o 14 voltios, así que de momento vamos bien (pero verifícalo que seguramente vendrá en una etiqueta por ahí).
Lo que pasa es que ese valor solo es uno: hay que tener en cuenta que la
diferencia de potencial (el voltaje), empleando un símil, sería como la presión con la que sale el agua por un grifo, pero hay otro valor, la
Intensidad (el amperaje) que en esto es aún más importante que sólo el voltaje y que vendría a ser la cantidad de agua que sale en un tiempo dado. Siguiendo con el ejemplo, podríamos emplar dos mangueras de distinto calibre para regar y sacar la misma cantidad de agua en el rato que tengamos para "abebentar" nuestra huerta regulando la presión (el chorro saldría con más fuerza si la manguera fuera más estrecha para poder regar con la misma cantidad de agua en el mismo tiempo).
Y ese valor a veces es el complicado: si no llegamos a un mínimo aquello será lentísimo (o directamente ni será ni na) y
si nos pasamos podemos dañar la pieza.
Este último riesgo es relativamente sencillo de evitar en objetos de hierro o acero, de una cierta consistencia pero a la vez
muy sensibles en los puntos de posible exfoliación ante aumentos de volumen. Basta con
observar si se forman burbujas: si esto es así, estamos aportando un exceso de Intensidad que puede acabar dañando la pieza.
También es importante saber que lo que realmente hacemos con la electrólisis es aprovechar que todas las moléculas de metal tienen una "habilidad" para empezar a moverse hacia un cuerpo cargado (podemos decir que con la corriente "tiramos" de todas las moléculas de un metal), así que lo que está pasando es que las moléculas que componen la herrumbre están menos "pegadas" que las del metal y aparte son más solubles en ese medio acuoso -lleno de atractivos iones flotando que tienden a unirse a ellas y a irse con ellas abandonado su lugar habitual- . Vamos, que afortunadamente la herrumbre es más infiel y en este caso la "infidelidad" es todo un valor a tener en cuenta (inssito que solo en este caso concreto, luego que no venga la respectiva pareja de nadie a reclamarme lo que yo he dicho en el foro, que yo estaba hablando de metales).
Y a qué quiero llegar con esta elucubración tan poco técnica: pues a que siempre, aunque poco,
perderemos un poquito de metal "bueno" en el proceso. Probablemente mucho menos que con un pulido, pero aún así hay que ahcer lo posible porque salga solo el óxido, así que no hay que andarse con prisas.
Y es que aunque queramos, tampoco podemos "acelerar" el proceso, ya que si entramos en la formación de burbujas de H2 y O2 corremos el riesgo de que esas burbujas se formen dentro de resquicios del metal y acaben dañándolo (recordemos que las burbujas son gas dentro de un líquido y que se forman a partir de un líquido más denso -más "pesado"- que el gas -por eso suben a la superficie- o sea que aumenta el volumen y con él aumenta la presión que hace esa burbuja contra lo que tiene alrededor para decirlo de forma sencilla). Esto será tanto más arriesgado cuanto más dañado esté el metal, siendo un riesgo muy alto cuando se trate de algo parecido a una hoja muy herrumbrada, con tendencia a romperse en láminas y con muchos huecos donde pueden formarse esas burbujas.
¿Habéis caido en el detalle de que he dicho que se formaban burbujas de H2 y O2, o sea de
Oxígeno y de Hidrógeno en forma de gas? pues eso es inevitable porque el agua también tiene tendencia a disociarse con esa corriente que empleamos, así que tenemos que de esa cubeta elctrolítica saldrá una cierta cantidad de oxígeno que no está nada mal y de
Hidrógeno, que ya no está tan bien si se acumula en un espacio cerrado, puesto que es bastante
inflamable (el Hindenburg estaba lleno de eso y viendo como acabó, creo que todos hemos pillado el concepto de que arde mucho sin expliccción química). O sea que: espacios abiertos o bien ventilados. Todos imaginamos que de un vaso de agua no puede salir el hidrógeno suficiente como para volar nuestra amada casa, pero evitemos riesgos, al menos hasta que acabemos de pagar la hipoteca.
Lo que sí es importante es el hecho de que la corriente sea contínua: no sirven los transformadores de las luces halógenas, ya que aunque saquen 12 voltios, es de corriente alterna (cambia de sentido 50 veces por segundo y claro, los iones dentro de la cubeta electrolítica no sabrían para donde ir los pobres).
Normalmente se suelen recomendar valores bajos de Intensidad, en torno a los 2 ó 3 amperios para 12 voltios como máximo, aunque esto será en función de la masa de la pieza y también de la cantidad de disolución electrolítica que sea precisa. Yo he estado haciendo experimentos con fuentes de PC, que suelen sacar unos 8 ó 9 Amperios a 12 v pero para piezas bastante grandes. Para limpiar monedas he visto emplear cargadores de móvil, que suelen sacar entre 0,5 y 1 A.
Por lo que toca a la solución electrolítica, la que comentas está dentro de las consideradas más sencillas de emplear y de las que dan buen rendimiento. También se emplean mucho el sulfato sódico y el hidróxico sódico. Yo solo he empleado este último y ya digo que con fines experimentales: algún día me tengo que poner en serio con este tema porque lo voy a necesitar y tampoco puedo dejar cosas aparcadas durante tanto tiempo.
De todas formas un detalle importante: estamos hablando de que
el ión positivo de todas estas soluciones es el sodio, y eso no es muy bueno dejarlo pegado a un metal como el hierro: igual que después del baño de espuma relajante hay que pasarse bien con agua -templadita a poder ser que si es fria, adios al efecto relajante del baño- para quitarse bien el jabón, aquí es conveniete
dejar la pieza en agua destilada desionizada durante unos cuantos días y cambiándole cada cierto tiempo ese agua.
Por lo que dices acerca de la conveniencia de
limpiar la pieza de aceite u otras grasas, te diré que más que recomendable es
absolutamente necesario: si el herrumbre está atrapado dentro de una película grasa que además es hidrófoba -se lleva peor con el agua que... bueno, que el aceite y el agua-, muy difícilmente vamos a retirar nada, eso sin contar con que tampoco será muy buen conductor de la electricidad y que además puede dejarnos la cubeta llena de porquerías nadantes que en nada ayudan a que la pieza quede limpita.
Caray, lo que me he enrrollado para contestarte solo un par de dudas. Si es que yo no sirvo para esto.
En fin, comenta cualquier duda que puedas tener, que yo ya me la he dado bastantes veces antes de conseguir resultados medianamente aceptables. Ah, y antes de ponerte a tocar estribos de 500 años mínimo, mejor busca un poco por ahí que seguro que encuentras una herramienta o una pieza de metal oxidadas más acordes al fin de investigación y con las que tendrás menos remordimientos si la cosa no va como habías planeado.
Un saludo.